Abierto hace apenas cuatro meses, The Wittmore se ha convertido en la nueva joya de la corona del turismo en el Barrio Gótico de Barcelona. Un pequeño y encantador hotel cinco estrellas,  inspirado en el lujoso Chiltern Firehouse londinense. Sus 22 habitaciones, todas, tienen vistas al espectacular jardín vertical del hotel (el más alto de la ciudad, de 32 metros). Y sus huéspedes, todos, caerán rendidos en breve ante las creaciones de la elegante coctelería en la planta baja del hotel. No sólo los huéspedes: cualquiera que decida hacerles una visita.

Y es que The Wittmore ha hecho una apuesta segura: el consagrado bartender Patxi Paniagua es el head bartender de una coctelería que dará mucho que hablar.

Inspirándose precisamente en el espectacular jardín vertical del Hotel, Patxi nos prepara una joya hecha cocktail. Un cocktail que “bebe” de la cultura que se va a incorporar al Witmore: una firme apuesta por los productos orgánicos y de kilómetro cero. Un concepto que os invitamos a descubrir después del verano, cuando se presentará la nueva carta de coctelería del hotel.

Pero volvamos al presente. Patxi se pone manos a la obra, trabajando como él sabe hacer: con elegancia y una precisión absoluta. Sus manos van creando ante nuestros ojos una suerte de “Gin Fizz” revisitado, más fresco si cabe y con unas increíbles notas herbales. Los ingredientes, sorprendentes: lima exprimida, sirope de té verde matcha (que él mismo elabora, realizando una infusión de té y yuzu -un cítrico japonés-), soda de flor de saúco (orgánica), clara de huevo para emulsionar y Magellan Gin.

El resultado es un cocktail elegante y sabroso, que Patxi decora con flores comestibles y un poco de té verde matcha. Un viaje hecho copa, color verde marino, que nos transporta -sin salir de este acogedor rincón en mitad del barrio gótico barcelonés- a viajes de ultramar.

Desde Magellan Gin lo tenemos claro: The Wittmore es un “pequeño-gran” hotel. La coctelería de Patxi es, sencillamente, gigante.